Borges fue nombrado profesor de Literatura inglesa y norteamericana en la Universidad de Buenos Aires en 1956, título que conservó hasta 1966. Primera práctica pedagógica en el marco de una institución, su tarea se inscribe dentro de una serie de actividades destinadas a difundir el placer y el conocimiento de la literatura, como las conferencias, notas periodísticas, traducciones, compilaciones, ediciones. El marco específico de la universidad implicó la creación de una estrategia discursiva específica; la adaptación a las demandas de una formación terciaria cohabitó, sin embargo, con una serie de libertades que Borges impuso, y que transforman sus clases en un objeto particular que permite aprehender su concepción particular de la formación literaria.