Las obras publicitarias son concebidas para promover un producto o un servicio en el marco de una campaña publicitaria. El artículo L. 112-1 del Código de la propiedad intelectual enuncia que "las disposiciones del código presente protegen los derechos de los autores sobre todas las obras del espíritu, cualesquiera sean que el género, la forma de expresión, el mérito o el destino". Debemos este principio de indiferencia a la teoría defendida por POUILLET, denominada "sobre la unidad del arte", según el cual "la ley debe ser uniforme para todas las obras que valoran el arte, y que procedan de él, de forma cercana o lejana" . POUILLET pensaba primero integrar los dibujos y modelos utilitarios en el regazo del derecho de autor, pero la regla es válida, más allá, para todo tipo de obras, incluyendo las obras publicitarias. Y por tanto, se comprueba forzosamente que si el principio de indiferencia permite englobar indiferentemente todas las obras, su naturaleza influirá en la práctica en el reconocimiento de la protección: la condición de originalidad será más o menos exigible; las reglas de titulación serán más o menos rigurosas; la extensión de la protección variará... Es este aspecto que revela el interés de un estudio sobre la protección de las obras publicitarias por el derecho de autor en Francia, cuyas particularidadespueden ser analizadas tanto en cuanto a las condiciones de protección de una obra publicitaria (1) como cuanto a la titularidad de los derechos sobre ella misma (2).