Constitutivo de nuestras identidades, dando forma a la imagen del mundo rural, contribuyendo al valor atractivo de los territorios, el patrimonio rural constituye un objeto de análisis y de comprensión de las sociedades que buscan respuestas a nuevos desafíos (identitarios, naturales, etc.) y que participan en la dinamización y en la diferenciación de los espacios rurales. Concebido de manera general como el conjunto de los bienes materiales e inmateriales de carácter natural, cultural y arquitectural que son transmitidos a las generaciones futuras, el patrimonio rural está constituido a la vez por el hábitat y los monumentos; los paisajes y los productos; los usos y las prácticas, las obras de arte y las diversas manifestaciones sociales y culturales. Considerado como un verdadero recurso, particularmente en relación al ámbito del turismo, el patrimonio rural se convirtió en un espacio dónde confluyen proyectos y acciones de movilización, que progresivamente fueron cristalizando en diversos modos de acción y de desarrollo territorial ampliamente difundidos a escala local. Como factor de expresión y de diferenciación, el patrimonio rural nos invita a interrogarnos sobre el efecto de continuidad entre el pasado y el presente y sobre la permanencia a través del tiempo. Pero más allá de esta continuidad evidente y de la herencia transmitida, el patrimonio rural se inscribe fundamentalmente en el presente. A su vez, las dinámicas actuales de construcción social y de movilización del patrimonio rural, pretenden conocer mejor, reinterpretar y valorizar los rasgos particulares de la historia de una sociedad determinada. En tanto que productor y reproductor simultáneo de la identidad y de la unidad territorial, el objeto patrimonial puede convertirse en un recurso fundamental para el turismo al movilizar rastros del pasado para la construcción de un proyecto actual de desarrollo local. Desde esta perspectiva, el patrimonio rural debe ser entendido como un recurso potencial para el desarrollo del turismo en el espacio rural. Siguiendo estos supuestos, el objetivo de este trabajo se centra en poner en evidencia los desafíos y las oportunidades que este último ofrece a las sociedades locales, aspectos que desarrollaremos en un primer momento de éste trabajo. En la segunda parte de nuestro análisis abordaremos la valorización del patrimonio rural como motor esencial de la atractividad turística de éstos espacios intentando captar, al mismo tiempo, las particularidades entre patrimonio rural edificado y no edificado para resaltar así toda su riqueza y diversidad. Finalmente, para ilustrar lo expuesto, nos centraremos en el lugar que ocupa el patrimonio rural en las políticas de desarrollo turístico en Francia presentando algunos dispositivos existentes a la escala territorial y ejemplificando fundamentalmente sobre una nueva política regional de desarrollo turístico: “los Grandes Sitios de Midi-Pyrénées”. Más allá de las acciones visibles en materia de imagen turística de las zonas rurales, procuraremos analizar éste dispositivo regional en su carácter global para comprender las acciones de los actores locales a diferentes niveles de intervención y de apreciar la implicación de los actores a la gestión territorial en torno a la aplicación de los principios de desarrollo sostenible. A su vez, los elementos de análisis propuestos permitirán apreciar el governanza de este proyecto que contiene diversas acciones complementarias en materia de conservación, de organización y de valorización del patrimonio representativo de los sitios más importantes del espacio rural en la región de Midi-Pyrénées.